martes, 28 de septiembre de 2010

iNtRaNqUiLiDaD De eStAr tRaNqUiLoS

La falta de costumbre. Eso es lo que veces nos lleva a una constante intranquilidad ante la calma. O también se podria decir: estar acostumbrado a que la tranquilidad nos dure poco. Buscamos en donde está la falla, la grieta del asunto. La realidad nos termina diciendo: "nos busques mas, no existe tal grieta por donde pueda filtrar lo malo". Y no encontramos explicación lógica ante, éso. Y queremos ver a los ojos a ese "gato encerrado" que seguramente anda por ahí. Pero tampoco existe tal gato. Frustrante para un buscador de errores. Entonces es cuando nos vencemos ante la normalidad que nos parece tan anormal. Que nos damos cuenta que somos producto de algunas malas repeticiones. Que cuando extienden la mano hacia nosotros, nuestro reflejo es cubrirnos de un ataque. Sin pensar, tal vez, que esa mano traiga una caricia. El rigor nos endurece y nos adopta. Uno sigue costumbres. Y ésa es la parte buena despues de todo. Porque nunca es tarde para dejar las sospechas atrás, para disfrutar de cada momento sin tratar de descubrir el artilugio. Para hacer de las buenas costumbres un día a día. Para acostumbrarnos a estar mejor.

3 comentarios:

Alfonsina dijo...

Es tan cierto!, cuando todo marcha de maravilla comenzamos a sospechar, a pensar que hay algo malo que se nos está escapando o que simplemente está por llegar. Pero que bien se siente uno cuando alguna vez y por o se que motivo puede olvidarse de esa desconfianza innata y disfrutar, solo eso.
Saluditos! Al!

Anónimo dijo...

...para vivir sonriendo a pesar de las pocas ganas, para comprender que x mas dura que sea la subida, intentándolo es como se llega a lograr los objetivos.Comprendiendo que en esta vida estamos de paso y que si hoy no haces realidad tus sueños, o al menos lo intentas, no habrá interiormente tranquilidad para estar tranquilos.
Besos y mi agradecimiento x tu visita!

Naio dijo...

A veces cuando no tenemos problemas, es cuando las cosas insignificantes comienzan a ser un problema. Ese gato encerrado que siempre buscamos, va a estar ahí, en lo más insignificante para demostrarnos que no estábamos equivocados, realmente había algo fuera de lugar! Pero estoy de acuerdo contigo, para que buscarlo cuando podemos hacer de cada un día sin problemas, con un poco de tolerancia y paciencia..