jueves, 30 de septiembre de 2010

ViAjAnDo BaJo TiErrA

Bajás por las escaleras hasta el andén del subte como todas la mañanas (de diás habiles). Como todas las mañanas, llega llenísimo ( la nunca bien ponderada "hora pico matinal"). Ya calculás a que altura tenés que pararte para quedar ubicado justo delante de una de las puertas (mucha observacion y práctica). Y ahi aparece la primera premisa: "si bajan 2 personas, bien pueden entrar 6". Asi que a contener el aire y tratar de hacernos lo mas elásticos y angostos posibles. Lleva laburo mantenerte estático durante el viaje, hay que concentrarse. Depende el dia podés encontrarte con distintos especímenes que hacen de compañeros de viaje:
La Señora Quejosa: Ya antes de entrar va diciendo: "No empujen, no empujen" (Aunque nadie la empuje, pero como para aclarar las cosas). Una vez dentro de vagon sigue con lo mismo sumado a unos resoplidos fuertes, unas miradas fulminantes al que se le ocurra acercarse demasiado o un "hagan lugar por favor" aunque haya lugar. Porque ella quiere viajar cómoda, que joder...Nota: Puede que éste especimen, segun las circunstancias, mute en "La Increpadora" (Veáse mas adelante)
El Violento: Es ése que aunque no haya más lugar se hace uno a empujones y ni se te ocurra decirle algo porque podes pasar todo el viaje en una larga discusión. Viaja con un estado de indignación constante, casi lo podes escuchar puteando con el pensamiento.
La Recostadita: Es esa que se te apoya ya como usandote de columna porque le pareciste cómodo y viene medio pachorra o dormidita. Puede ser terrible para tu vestuario si salio de su casa con el pelo mojado. Nota: Una buena tecnica es rapidamente hacerte a un ladito para que pierda el equilbrio (Eso si fueras medio jodido)
El Lector Empedernido: Sabe que todos van con una incomodidad del carajo. Pero el se niega a dejar de leer el librito o el diario. Va ocupando mas de su medio metro cuadrado lo cual es una falta grave. Nota: Generalmente nadie le dice nada, pero lo van oprimiendo hasta que el objeto a leer se va cerrando por pura mecánica.
La Increpadora: Es esa que espera a bajar para largar alguna queja o insulto del tenor de: "Pero porque no esperas que la gente termine de bajar pelotudo!", "podes correrte que tengo que bajar!" y afines. Son gente muy ansiosa y de poca paciencia.
Ojala, a tu llegada a destino no te hayas cruzado con ninguno de lo antes nombrados.
El regreso a casa no es menos placentero. Hora pico nuevamente. Vas a hasta la estacion terminal con la esperanza de que puedas ir con mayor comodidad. Siempre hay bastante gente en el andén. Sale la formacion. Sigue de largo. Asi, vacia y dejandote todo ilusionado. Cuando llega la siguente formacion que sí se detiene, la gente acumulada ya se triplicó. Ahi viene otra premisa: "buscar el mejor lugar cual juego de la silla". Y pensas: "si me siento, me va a costar salir de ahi con tanta gente apiñada" o " si me siento y llega alguien al que le deba ceder el asiento, voy a viajar oprimidísmo". Asi que lo mejor a veces es ponerse contra alguna superficie del vagón. Ya ubicarte contra una pared te hace una especie de "Pasajero V.I.P." porque no vas a tener problemas ante frenazos imprevistos y no vas a tener que moverte hasta que decidas bajar, lo cual ya es bastante. En ésos momentos podés encontrarte con otros tipos de especies:
El Apoyador: Es de lo peor que pueda compartir el viaje con uno. Ves que se ubica estrategiamente contra alguien de sexo femenino, en un acoso evidente o bien frente a algun muchacho acercando sutilmente la mano a las partes bajas ( segun la preferencia que tenga el Apoyador en cuestión) Nota: Se recomienda dejarlos en evidencia, ya sea increpandolos en voz alta o con un cortito a las costillas y que no le quede otra que abandonar el vagón.
La Resisssstida: Es esa que se ubica frente a la puerta, pero no te baja. Es decir ella se queda ahi y pretende que todos le pasen por los costados como si fuera finita. Nota: Generalemente se termina haciendo a un lado o bajandose ( Se vuelve a aplicar la fuerza mecánica)
Seguramente hay mucha variedad de pasajeros escapan a la lista y otros más en constante formaión.
Finalmente llegas a destino, reconfortado porque al menos no hubo un paro de subtes, todas tus pertenencias están donde las pusiste y lo mas importante, valga redundancia: Llegaste. Igual sabés que unas 12 hs. todo vuelve a empezar. Como diría el buen Pipo Pescador: El viajar es un placer que nos suele suceder... ¿No?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuanto me hiciste reir, aunque en realidad es para llorar...triste realidad de un...primer mundo? jajajja
Besos

Naio dijo...

jajaja, he viajado en el subte de BA pero no en horas pico gracias a dios!! Solo de leer el post me hacía acordar a la sensación de falta de aire!
Mucha casualidad que ayer me subí a un subte y quedé sorprendido del sistema, de la gente y del respeto ...

Anónimo dijo...

jajaja, eso que no viajas en tren...
es una experiencia que, si te gusta el turismo aventura, te recomiendo fervientemente!
Saludos!