Una risa con eco Chony, por invitarme a pasear por tu mundo.
Una chocotorta grande, Meli, para que nunca pierdas esa dulzura que contagias.
Un collar de caracoles brillantes a vos Negra, que estas en esa playa azul, para que iluminen tus pasos.
Una promesa de no volver a lo malo escrita en un papel con forma de flor y un payaso de peluche para que este siempre con vos que siempre estas conmigo.
Unos pochoclos humedos pero muy buenos para crear momentos amenos Adri, por el palpito mutuo.
Un acorde musical para que sepas que no hay rencor por lo que hiciste mal y por lo que no supiste como hacer.
Una cerveza con maní flotando para seguir compartiendo esas larguisimas y siempre buenas charlas, Witi.
Una estrella a cada uno de uds. Peques ( que ya no son tan peques) por dibujarme una sonrisa con solo estar en mi pensamiento.
Una llave para cerrar todo lo malo y un fresnel que ilumine tus pasos. Para que algun día solo queden cosas buenas por abrir entre nosotros, sin rencores, sin culpas, ni incomodidades.
Una promesa eterna, Negro. Y un abrazo enorme por los momentos compartidos.
Una canasta llena de besos, Gorda, por hacer de mi el hombre que soy.
Bro, te entrego el mapa para que nunca dejemos de encontrarnos.
Una campanita Silky para que sepas que siempre podes contar conmigo
Un gran espejo Jules para que, cuando te mires, recuerdes que quien que sos y cuanto vales.
Una tarde de mates para seguir charlando y riendonos. Iru.
Una rana de peluche Arrrdi, para que nunca sientas que estas sola.
Y un gracias a los que estuvieron a mi lado, a los que están hoy, a los que me enseñaron a reir, a los que me ayudaron a entender que llorar no estaba mal. Porque estoy convencido que nos cruzamos por algo. Que teníamos que pasar por esos momentos tan gratificantes. Que aprendimos de los momentos tristes. Que no fue casual. Que estaba escrito.
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